Descripción
Los caballos fiordos son fáciles de reconocer por su constitución física y su característica “línea de anguila”. El caballo fiordo es un caballo robusto de pequeño tamaño. Con un cuerpo compacto, un cuello fuerte y una cabeza grande y recta, este caballo recuerda a los caballos salvajes de Europa oriental y Asia. Los caballos fiordos presentan todas las tonalidades del color bayo. La crin suele recortarse de tal modo que queda rígida y la “línea de anguila” recorre todo el espinazo hasta la cola. Los caballos fiordos son animales fuertes y seguros. Por ello, actualmente aún se utilizan como caballos de montaña o para arar en terrenos accidentados, así como en carreras de trotones, competiciones de enduro o concursos completos.