Descripción
Si se quiere dar de comer a un unicornio o a un pegaso, se necesita muchísima paciencia, pues estos animales fantásticos son excepcionalmente tímidos y sólo se dejan ver raramente. Y cuando finalmente nos hemos ganado su confianza, se dejan incluso acariciar y llegado el momento. Incluso comen de la mano. Pero sólo se alimentan de las flores más sabrosas y de las frutas más dulces. Sus setas favoritas son incluso venenosas para otros seres. ¡Ayuda a los elfos a dar de comer y cepillar al unicornio!